domingo, 30 de mayo de 2010

Espejos sin reflejo

Vivir a la expectativa es difícil, pero vivir sin ella es peor.

Desde hace 3 meses he permanecido en dos países hermanos tan parecidos como diferentes en todos los aspectos y a raíz de los últimos acontecimientos, mis acciones parecen mas “pataletas” (comúnmente malcriadeces) que lógicas decisiones. Claro, a esto me refiero con que a ojos de ninguno de mis allegados familiares las transiciones que combinen una cierta búsqueda con un proceso “nomadistico”(con el hecho de permanecer viajando), no es sano para mi, ni para Valentina.

¿Han escuchado eso de dejar fluir las cosas?... pues es cierto, las cosas fluyen porque es una ley natural y cuando no lo hacen en un tiempo prolongado, simplemente desbordan un cauce y vuelven eventualmente a tomar su ritmo.
He dejado fluir las cosas y no me puedo quejar.

A medida que pasan los días las cosas se aclaran, pero siempre hay un grado d incertidumbre constante que me hace (como dice bambi) esperar, solo esperar.

Pero esta etapa de la espera ha llegado a su fin, mi deber ahora es esperar otras cosas.
Hay un viejo refrán que dice: pa’ atrás ni pa’ agarrar impulso… pero a veces el impulso es necesario para llegar mas lejos en la carrera.

… Por eso voy a tomar impulso…

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